LA VENIDA DE LA MUERTE

Hace ciento de años, vivía una familia en un rancho alejadísimo de la ciudad de Apatzingán, llamado San Juan de los plátanos, un lugar chico, plácido, ostentoso; eran muy felices y todo aparentemente estaba bien, hasta que el papá perdió el trabajo, buscaba y buscaba otro, pero su esfuerzo fue en vano, a causa de esto sus días eran de total aflicción, sentía que el mundo se le venía encima y por esto toma la decisión  de ir a pedir ayuda a su hermano que vivía en Apatzingán, pero en el trayecto ocurre un accidente; en el que toda su familia pierde la vida, la camioneta destrozada quedó en la orilla de la carretera, era tanto el dolor que sintió por su familia, que sus heridas no las sentía y así regresó a su casa; por el camino mucha gente lo vio, más nadie le ayudaba porque su aspecto daba miedo parecía que tenía un demonio dentro, al llegar a casa, él mismo se curó y con el paso de los días sanó, pero ya no era el mismo, pues había perdido su familia y él estaba pálido, con un semblante horroroso, parecía un muerto en vida, nadie lo visitaba, ni lo querían y una noche exactamente a las doce, este hombre murió de tristeza.

Ahora se cuenta de una visita para todos, pero no muy agradable, en ese rancho muy apartado de la ciudad, se escucha en boca de todos “la venida de la muerte”, más nadie sabe cuándo será; terrorífico  es cuando esto empieza, pues cientos de personas desaparecen. Aunque se vallan, él los sigue; justo a las doce cuando un tecolote llega a las casas y se pone a cantar, una persona muere de ese hogar, ya todos al ver un tecolote saben que es este señor que los viene a visitar.