jueves, 17 de diciembre de 2015

LA LEYENDA DE EL DUENDE DEL TESORO.


Cuenta la leyenda, que en el pueblo Aguililla, hace mucho tiempo vivía una familia conformada por cinco hermanos varones y, que por cierto esa familia contaba con muchísimas envidiables riquezas en metales preciosos como el oro, plata, un poco de diamante y por cierto también tenían cintos de miles de pesos. De esos cinco hermanos, el hermano menor nació enfermo ya que no iba a crecer por que quedo así como un enano, de bajísima estatura y, por eso los demás hermanos lo despreciaban y lo trataban muy mal.
Un día se llegó la hora de que su padre se enfermó por la tanta edad que tenía y se encontraba agonizando y en su agonía iba a repartir sus bienes en partes iguales a sus cinco hijos. Pero como todos los hermanos odiaban y despreciaban a su hermano menor y se llegó al acuerdo de que en cuanto muriera su padre también asesinarían a su hermano menor y así quedarse con su parte de la herencia.
El hermano menor al enterarse de eso, decidió actuar primero y así el asesinó primero a sus cuatro hermanos de la manera más cruel y despiadada que pueda atreverse a hacer una persona, e inició asesinando primero a su hermano mayor y lo hizo dándole decenas de puñaladas por todo su cuerpo, al siguiente lo desmalló de un golpe y lo ató a un tronco seco y lo quemó, al siguiente también lo desmalló de un fuerte golpe en la cabeza y lo ató de pies y mano a cuatro caballos e hizo que lo desmembraran y por ultimo al único hermano lo envenenó y así se quedó él con toda la herencia de su padre tanto como el dinero y las tierras tanto como el grande y codiciado tesoro.   Al poco tiempo su padre murió y la madre al enterarse de lo que el hermano menor había hecho murió de toda la tristeza, el dolor y la pena.
Al enterarse también el pueblo de Aguililla por la monstruosidad que hizo el duende, lo empezaron a buscar para asesinarlo y repartir el tesoro a todo el pueblo.

Entonces el duende al saber que lo querían matar se llevó el tesoro a lo alto de la sierra para esconderlo y también esconderse él de los miles de pobladores que lo buscaban. Pero de la desesperación en recordar lo que había hecho,   entonces se cortó las venas y manchó el tesoro con la sangre hasta que cayó muerto.
Desde entonces muchas personas van en busca del tesoro y cuando entran a la cueva se cierra rápidamente la entrada aparece el duende diciendo esto “Toma todo o no tomes nada” y si la persona deja todo lo que tomó del tesoro rápidamente se vuelve a abrir la entrada para poder salir. Se dice que cuando se entra a la cueva se escucha el llanto de los cuatro hermanos cundo estaban siendo asesinados.

Se dice que para que el alma del duende quede perdonada una persona debe entrar y llevarse todo el tesoro, o bien, sacrificarse y manchar el tesoro con la su propia sangre y así el alma del duende quedaría liberada y esa persona tomaría el lugar del duende.

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